Inicia mayo 2020 y comenzamos a recibir mayor demanda de Acompañamientos Terapéuticos presenciales. Eso no puede darse sin advertirnos, y advertir a nuestros pacientes, que la circulación misma de un acompañante por la intimidad de un paciente incrementa la exposición y el riesgo de contagio del paciente y su grupo familiar o conviviente. A medida que haya mayor circulación del virus en nuestra sociedad, mayor va a ser el riesgo.

Es un hecho que una nueva persona circulando por un domicilio es una nueva posibilidad de ingreso del virus al hogar. Sin embargo, no por ello debemos acomodarnos en la veracidad que puede soportar ese enunciado probabilístico. Queda de nuestro lado asumir la responsabilidad del cuidado, tanto del paciente como de uno mismo, pautando de manera estricta ciertos procesos necesarios que harían del Acompañamiento Terapéutico una función con menos riesgos que la de una simple nueva persona circulando.

Por todo lo antedicho, creemos necesario la implementación de un protocolo COVID-19 de seguridad e higiene para la realización de Acompañamientos Terapéuticos en modalidad presencial. Creemos importante que dicho protocolo actúe al modo de un consentimiento del paciente a la hora de asumir el riesgo que implica la inclusión de un acompañante en su hogar, a la vez que en la práctica misma del protocolo, se fundan las bases para transmitir, como agentes de salud que somos, las pautas necesarias de bioseguridad que cualquier ciudadano debe incorporar para un transito saludable, minimizando los riesgos de contagio.

Un consentimiento y protocolo de estas características funciona al modo de un contrato, en el que se asumen responsabilidades de ambos lados. Es el instrumento con el que se regula y ordena las condiciones en las que se va a desarrollar ese vinculo particular que es el Acompañamiento Terapéutico, en el marco de esta pandemia. Ya no es una decisión clínica atada a las circunstancias del tratamiento que llevamos adelante. Es un para todos, para cuidarnos y cuidarlos.

CONSENTIMIENTO INFORMADO – PROTOCOLO COVID 19